(Julio Ernesto)
Nació en Sonora. Desde temprana edad mostro preferencia por el arte y, de manera especial, por el dibujo. En los años 70, con total apoyo familiar, viajo a la Ciudad de México para estudiar y cursar la Licenciatura de Comunicación Gráfica en la Escuela Nacional de Artes Plásticas (ENAP) donde, además de adquirir teoría y técnica, disfruto de la cercanía y amistad de artistas y maestros como el pintor y arquitecto Gerardo Portillo, ex director de San Carlos y de la carrera de Comunicación Gráfica.
Por su formación, Julio se desempeñó también en áreas de comunicación y agencias de publicidad como ilustrador, bocetista y director de arte, ejerciendo siempre, paralelamente, su principal quehacer y obsesión, pintar. Participo en exposiciones individuales y colectivas dentro y fuera del país.
En la década de los 80, su compromiso con la pintura lo condujo a Europa y luego de radicar en España; donde participo en la “Muestra Internacional” del Centro Asturiano de Madrid, en la que obtuvo mención honorifica por la vitalidad y expresividad de su obra, entre otros reconocimientos.
Casi al inicio del nuevo siglo y milenio, Julio Ernesto cambió de firma, adoptando el seudónimo Julio de Rita (como un homenaje a su madre y a su lugar de origen). Su afán por evolucionar hacia nuevos temas y formas plásticas, lo han llevado a contar con una vasta obra figurativa y abstracta.
Los recientes acrílicos de Julio de Rita “Inmortales (Inobjetables)” inauguran otra veta que busca salirse de lo hecho, del estricto testimonio de una fotografía, para dar cuenta de personajes inmortales a través de pinceladas muy propias, producto de un depurado estilo.